El empujón a las Renovables de Zapatero

Hace un mes publiqué un artículo en este mismo Blog que cerraba con la siguiente pregunta: 

«Veremos qué hace el gobierno al respecto» (de las Energías Renovables)

… en referencia al nuevo Real Decreto que esperamos como agua de Mayo en el sector.

Pues bien, ya lo hemos visto. En la pasada campaña electoral, a nuestro actual Presidente del Gobierno, se le llenó la boca con mensajes progresistas a favor de las energías renovables (que vende mucho) y de la sostenibilidad energética.
Ahora que tiene que cumplir las promesas, ya se sabe: donde dije digo, digo Diego…

El recién renovado Ministerio de Industria con su flamante Secretario General de Energía, Pedro Luís arín Uribe, acaban de desmarcarse con la primera propuesta del nuevo Real Decreto de Energías Renovables, que nos tenía a todos los que tenemos algo que ver con el tema fotovoltaico con el alma en vilo. Pues bien, para presentar una propuesta como esa, mejor que se hubiera quedado en casa. A grandes rasgos:

• Reducción de más del 34% en la nueva tarifa para instalación en suelo.
• Limitación de potencia máxima por instalación a 2 MW.
• No hay prórroga de la fecha límite del 29 de Septiembre para las instalaciones en construcción para acogerse al marco tarifario actual.

En otras palabras, frenazo brusco de inversiones y varapalo a un sector que tenía una excelente velocidad de crecimiento, con creación de empleo y en el que nos estábamos convirtiendo en un referente a nivel mundial. Con esa retribución, o los fabricantes ajustan mucho los precios (hay cancha para bajar, pero no tanto) o los ritmos de instalación de años anteriores van a quedar reducidos a nada. Por no hablar de las inversiones realizadas en plantas fotovoltaicas que no vayan a llegar a tiempo a la fecha límite del 29 de Septiembre. Esta nueva retribución no hay caso de negocio que la soporte.

En resumen, gracias señor Zapatero el empujón prometido a las renovables, por estrangular a un sector con posibilidades de futuro y que suponía una alternativa energética para un país importador neto de energía.

¿Y el petróleo? Bien, gracias.